Al inicio del año me fui a otra ciudad a realizar mis practicas profesionales, viví y trabajé con dos buenos amigos. Trabaje al lado de excelentes personas y el estar lejos de mi familia y demás personas me hizo madurar en varios aspectos.
Después me gradué y afortunadamente pasó poco tiempo antes de encontrar un trabajo que me gustara. Buenos compañeros me recomendaron una asociación civil que buscaba a un programador. Y como yo lo que quería era programar, aún siendo consciente de mis deficiencias y falta de experiencia, me acerque a ver de que se trababa el proyecto.
Al
integrarme al desarrollo de software profesional, me di cuenta de las
debilidades que tengo como ingeniero y lo desactualizado de los
temas en mi currícula en cuanto a desarrollo software, nociones de desarrollo en equipo, metodologías de trabajo y administración de proyectos.
No culpó a mis profesores ni a ni universidad, la verdad es que como quiera que haya sido y afortunadamente, se lo que sé gracias a ellos. Tal vez si me hubieran dado todo no habría encontrado el interés que tengo ahora por la programación. Lo que si les reprocho y que creo que es justo, es el no haber dicho que afuera había todo un mundo en cuanto a código, era imposible que yo lo supiera o lo comprendiera; esto junto con mi apatía me llevaron a un rezago de conocimiento importante.
No quiero que a mis compañeros y futuros miembros de mi comunidad pasen por lo mismo.Por
lo que un grupo de amigos, maestros del Tecnológico y del CUS vamos a
formar una comunidad en la que se expongan temas y se hagan talleres de tópicos
acorde a las tendencias tecnológicas y empresariales. La idea es crear un
espacio en el que se aprenda enseñando, un lugar de difusión y divulgación, con
la finalidad de minimizar el rezago en el desarrollo de software profesional y
gestar un espacio de innovación y networking donde puedan surgir proyectos que
impulsen la región.
Tengo
la oportunidad de ser parte del proyecto
DIMA y aportar a la región con los diferentes eventos que se llevaron a cabo y
ser consciente de lo importante que es trabajar en red en pos del desarrollo
regional. Además de estar en contacto con los procesos que se llevan dentro de
una A. C y darme cuenta de que estar al tanto de estos procesos en cualquiera
que sea la institución me ayuda a mejorar mi trabajo como programador.
Tuve
la experiencia de desarrollar una
aplicación empresarial para la trazabilidad y la mejora de los procesos en el
acopio de leche. Aprendí lo importante que es estar en constante comunicación
con el cliente, las complicaciones que puede generar una mala dimensión del
proyecto, la necesidad de diseñar y estructurar antes de ponerse a codificar y
lo valioso que puede llegar a ser el seguir un metodología apropiada, así como
lo importante de delegar actividades y confiar que en las personas hagan su
trabajo. Vivir en carne propia los estragos de una mala comunicación en equipo.
Asistí
a un taller de emprendimiento donde conocí a gente muy talentosa y donde me di
cuenta del potencial que tiene la región. Dentro del taller pude ver lo que necesito
para llevar ideas y proyectos al siguiente nivel y poder crear una PyME. Así
como ser consciente de mis capacidades como emprendedor y hacia donde quiero
ir.
También
me vi en la necesidad de rechazar proyectos y dejar de hacer cosas para poder
enfocarme a los que realmente importan y puedan generar un bien común.
También puse un negocio junto con mi mejor amigo, ha sido toda una experiencia, aunque me temo que no le he dedicado el tiempo debido. He delegado la mayoría de las actividades a él, sin embargo, pienso que es lo mejor, puesto que el carácter del emprendimiento es uno de los cuales he decidido abandonar para enfocarme en otros. Sin embargo, pienso brindarle todo el apoyo necesario para que siga creciendo y podamos hacer más cosas juntos.
Por otro lado este año que viene es importante. Con muchos proyectos en camino, y muchas cosas por aprender. Quiero terminar la cantidad ingente de libros que tengo, quiero hablar más fluido el inglés. Quiero viajar y jugar. Y quiero crecer como persona y como profesional. Quiero ayudar a mi comunidad y crear nuevas oportunidades para mí y para los que me rodean. Quiero enseñar, y que me enseñen. Quiero dormir y quiero más momentos de incertidumbre. Así que manos a la obra, después de todo la vida es un conjunto de nuevas experiencias.
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